Hace unos días, GEA tuvo el privilegio de recibir a dos representantes de Calconut: Desiree, de Responsabilidad Social Corporativa, y Serezade, del departamento de marketing. Durante su visita, tuvimos una amena charla sobre los comienzos de Gea Alicante, y como hemos evolucionado hasta donde estamos hoy en día, así como las necesidades de una asociación donde el 100% de sus componentes, son voluntarios y cada una de las acciones que se realizan están sufragadas por donaciones o los mismos voluntarios.
Pero Desiree y Serezade no vinieron solo a hablar. Trajeron consigo 12 torres PC, 10 monitores, 2 impresoras y 3 teclados que han donado y que van a tener una nueva vida, apoyando a aquellos que no han tenido la posibilidad de acceder a conocimientos informáticos o en asociaciones de recursos limitados.
La Fundación Juan Peregrín Mula, nacida en 2017 gracias al impulso de Calconut, es un testimonio vivo de cómo las empresas pueden ser agentes de cambio social significativo. Desde su creación, la Fundación ha tejido una red de proyectos dedicados a promover el desarrollo humano en diversas esferas sociales. Este compromiso altruista, refleja la esencia misma de lo que significa ser una empresa socialmente responsable.
Estamos muy agradecidos por esta donación, porque, al unir fuerzas, podemos lograr mucho más de lo que podríamos hacer individualmente. En un mundo donde las desigualdades persisten y las necesidades sociales son vastas, la solidaridad empresarial desempeña un papel crucial en la construcción de comunidades más fuertes y equitativas.
El ascenso meteórico de Calconut en el mercado de los frutos secos es un testimonio de su excelencia empresarial, pero su verdadero éxito radica en su capacidad para marcar una diferencia significativa en la vida de las personas y en el tejido social en general y esperamos poder seguir colaborando en un futuro.
En GEA, estamos profundamente agradecidos por la generosidad de Calconut y por su apoyo a nuestra misión.